Los asientos delanteros van sujetos a la carrocería mediante sendos railes de acero pintados. Dichos railes estaban con algo de corrosion superficial y pensé que como de costumbre, darles un repaso sería sencillo y agradable.
El óxido es completamente superficial, pero reconozco que desde que descubrí el maravilloso mundo de la limpieza con chorro de arena, no vuelvo a gastar dos tardes enteras rascando, para al final obtener un resultado mediocre. Prefiero gastarme 15 euros, y completar todo el trabajo en tan sólo unas horas.
Así que se limpiaron con el chorro de arena y posteriormente las pinté con la pintura POR15 que tanto me gusta. Esta pintura si se aplica de forma lenta y gradual con un pincel, tiene un acabado casi espejo. Cuando estaba seca al tacto, le di una capa de pintura negra en spray.
¿El resultado? fantástico!
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