lunes, 24 de noviembre de 2014

Restauración de los pomos y sus números y letras

Viviendo en un piso en el centro de una gran ciudad, es difícil realizar una restauración en tiempo y forma. Los ruidos, los olores, el espacio, los niños.... todo en contra. Pero de vez en cuando hay pequeñas piezas que si se pueden trabajar en casa.

En esta ocasión me fijé en los pomos de la palanca de cambios y la de la supermarcha u "overdrive" (que todavía no lo tengo montado). Los pomos llevan los números o letras grabados, y originalmente estaban pintadas. Con el paso de los años, ésta pintura se caía, y los números se llenaban de porquería.

Hace unos tres años, tuve la ocasión de restaurar el pomo del Austin Healey que tenía exactamente el mismo problema, y como el resultado fue fantástico, pensé en realizarlo igualmente con los del Land Rover.

Los pomos estaban en buen estado, aunque envejecidos y poco lustrosos. Esas letras llenas de porquería, eran todo salvo bonitas.



El primer paso consiste en limpiar una a una todas las letras o números con la ayuda de una aguja de coser o un alfiler. Hay que ir rascando el interior de la letra, levantando la pintura original que quede, quitando la porquería, y sobre todo raspando bien todo el interior. Este raspado es fundamental para que la nueva pintura agarre lo mejor posible. Es una tarea laboriosa, pero sencilla y gratificante. Tardé unos 15 minutos en los dos pomos.

El segundo paso consiste en una limpieza exhaustiva. Para ello, con unos bastoncillos de algodón para las orejas, se limpian las letras con alcohol sanitario. Hay que frotar mucho, y usar varios bastoncillos hasta que no salgan manchados. De esta forma, la pintura agarrará mucho mejor.




El tercer paso requiere algo de buen pulso, pero bueno, cualquier lo hace, no es para tanto. Se necesita un bote de pintura blanca (tanto mate como brillante). Un bote de 250ml de los que venden en las tiendas orientales de la esquina vale perfectamente. Es importante que la pintura esté espesa, por lo que no hay que mezclar disolvente o aguarrás. Se abre, se remueve bien, y con un alfiler vamos mojando su punta. Poco a poco vamos depositando gotitas de pintura en las letras, rellenándolas hasta que rebosa. Así todas las letras o números. Nos hay que preocuparse porque en algunas ocasiones, haya partes de la letra que queden completamente sumergidas en pintura. Ésto es bueno. Se deja secar un día entero



El cuarto y último paso es el lijado de la pintura. Para ello hay que usar una lija mojada en agua de grano muy fino, de 600 u 800 como mínimo. Yo usé unas esponjas con lija que venden para carrocería, perfectas para estas operaciones. Debajo de grifo, podemos ir lijando suavemente la superficie del pomo, de forma que iremos quitando la pintura que sobresalía. Lijaremos hasta que sólo quede la pintura en el interior de cada letra, con los bordes perfectamente definidos.


Os adjunto un video que saqué cuando restauré el pomo del Austin, donde se puede ver el proceso de lijado, que es el mismo en cualquier caso.



Y ya está. Ya tenemos un pomo con sus letras perfectamente pintadas de forma completamente profesional. El pomo se quedará con un aspecto mate después del lijado. Si se le quiere sacar algo de brillo, se puede frotar con un paño y pulimento de carrocerías, incluso el limpia vitrocerámicas serviría. Si se quieredejar el pomo brillante, también se le puede aplicar un par de capas de barniz en spray brillo, pero quedaría horroroso un pomo brillante en un Land Rover. Si fuese un Jaguar obviamente sería todo lo contrario.

Ahora tenemos un pomo perfectamente restaurado, con las letras blancas que destacan sobre el color negro del pomo.